12.05.2011.- CCOO manifiesta su más profunda preocupación y rechazo al anuncio del Primer Ministro danés Hjort Frederiksen, de que su país va a restablecer los controles en las fronteras con Alemania y Suecia tras sellar su Gobierno un pacto con la extrema derecha, anuncio que viene precedido por la propuesta de Francia e Italia de reformar el Tratado Schengen, y que parece que es la extrema derecha quien está marcando la agenda los gobernantes en Europa.
Es la primera vez desde su creación, hace 21 años, que un país rompe el Acuerdo de forma unilateral, y este hecho constituye una grave amenaza para los avances realizados en todos estos años en materia de unidad y libre circulación en el espacio europeo. El miedo preventivo a la inmigración, constituye uno de los grandes males que amenazan la consolidación de los valores europeos recogidos en la Carta de Derechos Fundamentales. El auge de la extrema derecha en Dinamarca y Finlandia y otros países europeos, representa una seria amenaza que conduce inexorablemente hacia la pérdida de derechos y libertades para todos y comienza a vislumbrarse nuevamente una enfermedad en Europa, el nacionalismo, que parecía superado desde el final de la II Guerra Mundial.
Para la secretaría de Empleo y Migraciones de CCOO, la entrada en Europa de 30 mil personas que llegan del Norte de África, que suponen una cantidad insignificante comparada con el número de habitantes de Europa, y que además llegan como consecuencia de los conflictos en el Norte de África y Oriente apoyados y alentados por los propios gobiernos europeos por entender que significan un claro avance democratizador, no suponen un peligro real para los mercados de trabajo europeos, ni para la ciudadanía europea, y este hecho está siendo utilizado por los nacionalistas y extremistas de derechas para forzar medidas xenófobas y excluyentes que no coinciden con la trayectoria europea, su sistema de valores, ni con el sentir general de la población europea.
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