La Junta de Personal de Ciudad Real exige soluciones a las deficiencias denunciadas
Publicado en www.eldiadeciudadreal.com
Transcurridos 45 días desde que se implantó la Nueva Oficina Judicial en Ciudad Real, con la consiguiente reestructuración del trabajo de cada órgano judicial entre las Unidades Procesales de Apoyo Directo y los Servicios Comunes Procesales, la Junta de Personal considera que es tiempo suficiente para hacer una primera evaluación de la situación actual, siendo necesario destacar las irregularidades y deficiencias, tanto organizativas, funcionales e informáticas, que dificultan el trabajo diario de los funcionarios destinados en las distintas Oficinas, para la cual, ha analizado los problemas comunes y posteriormente los ha detallado por servicios y unidades.
Deficiencias comunes
Carencia de los Protocolos de Actuación. Al día de la fecha, explica la Junta de Personal en un comunicado, no se dispone de los protocolos de actuación, considerándose que es una herramienta necesaria para la organización y coordinación de los Servicios Comunes y de las UPAD´S.
Las plantillas, según la Junta de Personal, en general son escasas en todos los servicios comunes, pues la mayoría de los funcionarios han visto incrementado su volumen de trabajo, respecto a su anterior puesto, hasta el punto de que se está ocasionado un gran retraso en el trámite de la mayoría de los procedimientos. De hecho, ha aumentado en gran medida la burocracia (ejemplo, cada vez que un procedimiento pasa de un servicio a otro, ha de hacerse constar por diligencia en dicho procedimiento, y en el correspondiente registro), en otras no permiten entrar a los funcionarios, o les impiden continuar su trabajo, en muchas ocasiones no es posible realizar todas las diligencias necesarias para el trámite de los procedimientos judiciales, por faltar resoluciones en el sistema Minerva-NOJ debiendo acudirse al texto libre, llegando a hacerse funciones que exceden de las correspondientes a cada servicio.
Existe gran dificultad para los funcionarios de las UPADS y servicios comunes de ordenación del procedimiento y de ejecución en localizar los procedimientos judiciales que, unas veces se encuentran en otro servicio diferente, y otras no se encuentran ni se sabe de su paradero. El espacio en los servicios comunes de ejecución es escaso, tanto para la ubicación de los funcionarios como para la colocación de los expedientes. Existe abundante cableado por todas partes, lo que dificulta el movimiento y ocasiona el correspondiente riesgo laboral.
Los escritos que presentan los profesionales y las partes tardan varios días en llegar a su destino, porque no se dirigen ni se envían al servicio donde se encuentra el procedimiento y, a veces, se amontonan en espera de que llegue el momento de su atención o se averigüe la oficina donde está el procedimiento, lo que origina un gran retraso. Los funcionarios tienen dificultad en conocer el límite de su competencia en el trámite de un procedimiento.
A pesar de existir un servicio específico de atención al público y profesionales, tanto los servicios comunes como las UPAD’S, se ven constantemente interrumpidos por ciudadanos y profesionales preguntando por sus procedimientos, con las consiguientes quejas por el retraso o por la falta de localización, lo que ocasiona una gran pérdida de tiempo para todos.
Hay bastantes dificultades con la utilización de tarjetas y claves para acceso al punto neutro, averiguación patrimonial, y otras consultas, no todos los funcionarios pueden acceder, algunos aún no tienen claves.
Existen dificultades con notificaciones pormedio de Lexnet, en algunos servicios se hacen en la forma tradicional.
Deficiencia de formación en el puesto de trabajo, no habiéndose cumplido lo que el Ministerio de Justicia había garantizado, pues la formación que se ha impartido ha sido muy general y escasa.
Para concluir, la Junta insiste en lo que siempre ha manifestado desde antes de la puesta en funcionamiento de la NOJ en Ciudad Real: que no se debía de haber llevado a efecto la misma sin antes depurar todos los fallos y disfunciones que se conocían en las ciudades de Burgos y Murcia y que ven como se repiten la mayoría de ellos en nuestra capital, por lo que, a día de hoy, siendo presumiblemente imposible la vuelta atrás, dicen que, o se pone rápidamente solución a todos los problemas ya definidos en este informe, o la Justicia en Ciudad Real, a pesar del gran esfuerzo de todos los que realizan su trabajo diario en ella, va hacia el colapso total, el cual se tardaría años en solucionar y con un gran coste económico; ello claro está, dicen "si, como se dice, se quiere prestar al ciudadano una Justicia de calidad".
Enlace permanente
Imprimir artículo